El scrolling es un término en inglés que se ha popularizado en español y significa desplazar.En el contexto digital, el scrolling se refiere al acto de mover el contenido de una pantalla hacia arriba o hacia abajo, utilizando el ratón o el dedo en dispositivos táctiles, para poder visualizar la información que no cabe a primera vista.

Es importante saber que el scrolling, aunque parezca una acción inofensiva, puede tener consecuencias significativas en nuestra sociedad, especialmente en el contexto del consumo excesivo de redes sociales y contenido digital.

¿Qué problemas genera el scrolling en la sociedad?

● Salud mental: El scrolling constante puede llevar a:

○ Ansiedad y depresión: La exposición constante a información negativa, comparaciones sociales y la búsqueda incesante de validación puede generar sentimientos de insuficiencia y tristeza.
○ Aislamiento social: Priorizar el mundo virtual sobre las interacciones reales puede llevar a la desconexión con amigos y familiares.
○ Trastornos del sueño: La luz azul de las pantallas y la estimulación constante del cerebro dificultan conciliar el sueño.
○ Adicción: El scrolling puede convertirse en un hábito difícil de controlar, similar a una adicción.

● Desinformación: La facilidad con la que se difunden noticias falsas y contenido engañoso en las redes sociales contribuye a la polarización y a la desconfianza en
las instituciones.

● Productividad: El tiempo que pasamos scrolling podría invertirse en actividades más productivas o en el desarrollo personal.

● Desarrollo infantil: El exceso de tiempo frente a pantallas puede afectar el desarrollo cognitivo y social de los niños.

● Impacto ambiental: La producción y el consumo de dispositivos electrónicos tienen un impacto negativo en el medio ambiente.
El scrolling, esa acción tan cotidiana de deslizar el dedo por la pantalla de nuestro teléfono, ha transformado radicalmente la forma en que consumimos información. Sin embargo, esta práctica, tan arraigada en nuestra vida digital, está teniendo un impacto significativo en nuestra capacidad de atención y concentración.

¿Cómo afecta el scrolling a nuestro cerebro?

● Fragmentación de la atención: El constante cambio de contenido y la búsqueda de nuevas notificaciones estimulan nuestro cerebro a buscar recompensas inmediatas, dificultando la concentración en tareas que requieren un esfuerzo sostenido.
● Disminución de la profundidad de procesamiento: El scrolling nos acostumbra a un consumo superficial de información, priorizando la velocidad sobre la comprensión profunda.
● Fatiga mental: La sobrestimulación constante del cerebro puede llevar a un estado de fatiga mental, dificultando la toma de decisiones y la resolución de problemas.
● Alteración del ciclo del sueño: La luz azul emitida por las pantallas interfiere con la producción de melatonina, la hormona que regula el sueño, lo que puede provocar dificultades para conciliar el sueño y alteraciones en los patrones de sueño.

¿Cuáles son las consecuencias de esta fragmentación de la atención?

● Dificultad para aprender: La incapacidad de concentrarse en una tarea durante un período prolongado dificulta la adquisición de nuevos conocimientos y habilidades.
● Reducción de la creatividad: La creatividad requiere de un pensamiento divergente y de la capacidad de establecer conexiones entre ideas aparentemente no relacionadas, lo cual se ve obstaculizado por una atención fragmentada.
● Aumento del estrés: La sensación de estar constantemente «conectados» y la presión de responder a las notificaciones pueden generar altos niveles de estrés.
● Deterioro de las relaciones sociales: El exceso de tiempo dedicado a los dispositivos electrónicos puede afectar negativamente nuestras relaciones interpersonales, ya que no prestamos atención a las personas que nos rodean.

¿Cómo influye el scrolling en nuestras relaciones interpersonales?

El tiempo que invertimos en desplazarnos por las redes sociales puede tener un impacto significativo en la calidad y cantidad de nuestras interacciones sociales «reales». Aquí te presento algunas de las formas en que esto sucede:

● Desplazamiento de la atención: Cuando pasamos mucho tiempo en las redes sociales, no prestamos atención a las personas que nos rodean. Las conversaciones cara a cara pueden volverse superficiales o interrumpirse constantemente por notificaciones.
● Comparación social: La exposición constante a las vidas aparentemente perfectas de otros en las redes sociales puede generar sentimientos de inferioridad y soledad. Compararnos con los demás de forma negativa puede erosionar nuestra autoestima y dificultar nuestras relaciones.
● Aislamiento social: Priorizar las interacciones virtuales sobre las reales puede llevar al aislamiento social. Aunque las redes sociales nos permiten conectar con personas de todo el mundo, no pueden reemplazar las relaciones humanas basadas en la empatía y la conexión emocional.
● Dificultad para establecer conexiones profundas: Las interacciones en las redes sociales suelen ser superficiales y basadas en la imagen. Esto puede dificultar el desarrollo de relaciones más profundas y significativas.
● Falta de habilidades sociales: Al pasar demasiado tiempo en el mundo virtual, podemos perder habilidades sociales importantes como la comunicación no verbal, la escucha activa y la empatía.

La dopamina, a menudo conocida como la «molécula del placer», juega un papel fundamental en nuestra experiencia del scrolling y en la adicción que muchas personas sienten hacia las redes sociales.

¿Cómo funciona la dopamina en este contexto?

Nuestro cerebro está programado para buscar recompensas, y la liberación de dopamina es una parte esencial de este sistema.
Cuando realizamos una acción que consideramos placentera, como comer algo delicioso o pasar tiempo con amigos, se libera dopamina, lo que refuerza ese comportamiento y nos
motiva a repetirlo.

¿Qué podemos hacer para reducir estos efectos?

● Establecer límites: Definir horarios específicos para el uso de dispositivos y establecer zonas libres de dispositivos en casa.
● Practicar la atención plena: La meditación y otras técnicas de mindfulness pueden ayudar a mejorar la concentración y reducir el estrés.
● Leer libros: La lectura de libros requiere una concentración sostenida y puede ayudar a mejorar la capacidad de atención.
● Realizar actividades que requieran concentración: Hobbies como la pintura, la música o la resolución de puzzles pueden ayudar a entrenar el cerebro paramantener la atención en una tarea.
● Desconectar: Programar momentos de desconexión total de dispositivos para descansar y recargar energías.

En resumen, el excesivo scrolling puede tener un impacto negativo en nuestra salud mental y en nuestra capacidad de aprender y trabajar de manera efectiva. Es importante ser conscientes de este problema y tomar medidas para reducir su impacto en nuestras vidas.

Respuesta M&G:

Mariana: Mi conclusión es que muchas veces no sabemos ni el término de pasar horas pegados al teléfono ,entonces tampoco sabremos las afecciones o consecuencias que nos trae.Utilizarlo y desplazarse a dia de hoy es una práctica habitual que hacemos, porque es una dopamina inmediata a lo que podamos dar respuestas casi en segundos, en mi caso. implementar dosis de dopamina sana (deporte, conversaciones amenas, un libro que te guste, o un plato de tu comida favorita) sería una forma de parar con el consumo excesivo.

Guillermo: Somos muy inconscientes de esta acción que hoy en día la hemos normalizado en nuestros día a día, sentimos la necesidad de revisar las redes sociales continuamente así no tengamos una notificación o algo especifico que buscar, la satisfacción que te da estar scrolleando se convierte adictiva y el algoritmo te va llevando a seguir consumiendo contenido de tu interés, no nos damos cuenta del tiempo que hemos pasado frente la pantalla, esto me pasa mucho a pesar que he bajado el tiempo en pantalla, recomiendo ver en sus dispositivos el tiempo que pasan diario, semanal y mensual y se daría cuenta la locura de los datos, y de allí te planteas un mejor uso de la dispositivos digitales.